Planea y analiza datos financieros

Y pues es quien hace iguales
al duque y al ganadero,
poderoso caballero
es don Dinero.

Francisco de Quevedo

Aunque Francisco de Quevedo cargó de ironía su famoso poemas “poderoso caballero es don Dinero”, la verdad es que el acceso a los recursos monetarios ha sido el gran igualador social en los últimos siglos y lo sigue siendo. Lo mismo se puede decir del acceso a los servicios financieros que en alguna época sólo eran asequibles a las grandes fortunas, hoy eso también ha cambiado. Las finanzas se ha vuelto el camino para diseñar un futuro mejor a partir de las decisiones que se tomen en el presente para quien se atreva a recorrerlo.

Aprender para crecer

El análisis de datos financieros es la base para la planificación con miras al futuro. Para ello, es necesario conocer la rentabilidad de cada producto, el nivel de riesgo de cada uno y el plazo en el que se podrá disponer de la inversión, entre otros factores.

En otras palabras, las variables a considerar para usar los instrumentos financieros para afianzar un patrimonio son muchas y combinan tanto los factores del mercado como los factores personales el monto de los ingresos, la edad de quien va a invertir, el monto de los gastos presentes y futuros, etc.

Por ello es necesario aprender mucho de ambos aspectos para integrar a las decisiones monetarias una perspectiva más amplia que simplemente ganar algo más que el interés, usualmente muy bajo, que ofrecen los bancos con el ahorro clásico.

Siempre es un buen momento

Como la planeación financiera debe construirse a partir de la realidad de cada persona, el mejor momento para iniciarla es cuando se toma la decisión de hacerlo. El mercado financiero ofrece un abanico casi infinito de posiciones, portafolios, fondos, divisas, metales y muchos otros instrumentos que se pueden utilizar para ir consolidando los objetivos que se van marcando.

La planeación financiera se puede hacer con objetivos graduales: crear un fondo de emergencia, para luego asegurar la educación superior de los hijos, y después abonar a un capital para el momento del retiro laboral, o quizá sólo para fondear un emprendimiento, etc. Los plazos para cada objetivo también forman parte de las tácticas con las que se lograrán la estrategia para cada uno de ellos.

Mucha gente asocia, por las grandes y sonadas caídas de la bolsa a lo largo de la historia, como un riesgo total y absoluto el invertir en acciones; y desconocen que hay una oferta muy amplia que puede satisfacer las demandas de los inversores que huyen del riesgo, así como ofrecer oportunidades a aquellos a los pueden apostar a perder, pero también a ganar. No se trata, pues, de invertir en cualquier cosa y a ciegas, sino por el contrario a través del conocimiento de las diversas opciones que hay en función del objetivo o los objetivos.

La planeación financiera no es estática, sino que requiere la adaptación a las circunstancias y el constante monitoreo para no desviarse del puerto al que se quiere ir, aunque momentáneamente se requiera algún ajuste para capear las tormentas.

No se trata de afirmar que conocer los datos financieros sea el antídoto perfecto para contrarrestar cualquier turbulencia o inestabilidad, pero sí permite ponderar desde un punto de vista estratégico más opciones que permitan salir mejor librado también de esos momentos de incertidumbre que el coronavirus nos han enseñado que pueden aparecer de la nada en cualquier momento.

Con estudio y conocimiento se puede lograr que la planeación y el análisis de los datos financieros sean la forma para que “el poderoso caballero” sea el compañero ideal en el viaje de la vida.

Fuentes:

https://www.estrategiasdeinversion.com/analisis/bolsa-y-mercados/el-experto-opina/la-planificacion-financiera-permite-disenar-el-n-452813

https://www.andbank.es/observatoriodelinversor/las-4-claves-de-la-planificacion-financiera-objetivos-plazos-presupuesto-y-control-de-las-decisiones/